Día a día, 365 días 184

Primavera otoñal.

Día a día, 365 días 183

Trilogía

No sabía por cual decidirme.

Ya empiezan las hormigas a llenar su despensa para el invierno, tan pequeñas y tan trabajadoras ellas, supongo que como en todo, habrá jerarquías.

Día a día, 365 días 182

Dos flores, dos sonrisas, dos mediterráneas.

Estas dos jóvenes, han sido caritativas y han posado para mi después de yo leer el comentario que Javier me ha dejado en la entrada anterior, espero que te guste Javi.

Jejejjeje pero que conste que también estuvieron en la Plaça delante de los Mossos.

Trabajamos juntas el año pasado y este año lo estamos haciendo de nuevo, son la alegría y frescura de la plataforma, Paula y Telva, dos jóvenes de hoy, que me alegran las tardes.

Día a día, 365 días 180,181

Limpieza.

Sanidad.



La Plaça al despertar.

Barcelona agredida, inciso entre foto y foto, lo de ayer se ha de conocer.

Mi profe de diseño del Instituto.
Foto de Gemma Mimi





Hoy después de lo de ayer, los ánimos están encontrados,no hemos de confundirnos, el problema no son los Mossos, ni el macrobotellón de anoche en la Plaça, el problema es la crisis que sufré nuestro país, y el desengaño del pueblo con sus políticos, los recortes sanitarios y los escandalosos sueldos de quien nos representa, los despidos, la inseguridad de un futuro,...eso es el problema, y por eso hemos de seguir adelante, pero en paz, dialogando, nunca prejuzgando y sobre todo, nunca contestando con violencia.

Día a día, 365 días 179

Hoy, no hay nada más que decir.

Día a día, 365 días 178

Cambios.

¿Os acordais de la foto 147?

http://irlanda1962.blogspot.com/2011/04/dia-dia-365-dias-147.html

Dejarme ser sarcástica, y que conste que en ningún momento me quiero reír de la situación de este pobre hombre, pero su situación ha cambiado en unos días y la nuestra puede cambiar.

Ya no duerme en los bajos, si no en un entresuelo, tiene ciertas comodidades, que antes no tenía, pues cuenta con un colchón, y manta nueva, lo que no ha cambiado son sus hábitos de dormir la siesta. Bendito él que puede hacerla.

Esta mañana a las 7.20h. cuando he salido de casa habia otro hombre durmiendo en las gradas de la plaza, y cuatro pasos más adelante otro en un banco, cerca de la puerta del metro, este medio día me vuelvo a encontrar al señor del otro día, como ya veís en la foto, la verdad, ya dije que no era muy normal, pero es que creo que vamos acabar más de uno así, como esto no cambie. Lo bueno es que podremos practicar la siesta de nuevo.

Ayer en una de las empresas que trabajo despidieron a 65 personas de golpe, telefónica sube ahora sus despidos de 5.600 a 8.500.

Y luego no quieren que acampemos en nuestras plazas...Señores políticos, lo hacemos para acostumbrarnos y saber disfrutar los cambios como el personaje de la foto y darles menos problemas.

¡Estos políticos!....es que no entienden al pueblo.

Día a día, 365 días 177

Lo sé.

Soy repetitiva, pero esta farola me tiene robado el corazón.

Día a día, 365 días 176

La otra cara de la ciudad.

Día a día, 365 días 175

Que no se agriete más, por favor.

Día a día, 365 días 174

Un capricho.

Hoy después de votar, y camino al trabajo me he dado un capricho, me he sentado en una terracita y me he pedido una Coca-Cola fresquita, (¡¡vivan los diminutivos!!, que haría yo sin ellos), viendo el vaso vacio, pensaba en lo que estos días ha pasado en nuestro país.

Recuerdo que cuando tenía 7 ó 8 años, salí del colegio y en la pared de enfrente vi la careta típica de teatro que representa al drama con una cruz sobre la boca, debajo de ella había escrito "LLIBERTAT D’EXPRESIÓ “, yo le pregunté a mi madre que quería decir, en aquella época pocas explicaciones recibíamos de los padres y por mi parte, de mi madre, menos, me hizo callar y su respuesta fue: No son cosas de niños.

Yo en ese momento ni siquiera sabía que vivía en una dictadura.

Ese día yo decidí que nunca callaría y que nunca mandaría callar a nadie, y que si me preguntaban y sabía, contestaría, y si no sabía, lo reconocería e intentaría aprender. Todavía hoy veo claramente la careta, por eso creo que estos días hemos hecho lo correcto por expresarnos, de ser , y no me callo, creo que lo que ha pasado estos días y que espero siga pasando , hasta que nos contesten o nos reconozcan que no saben y decidan aprender, tenía que haber pasado muncho antes.

Ese día ocurrió una transformación en mí, quería saber el porqué de la careta, el porqué de su boca cerrada, estuve atenta a todo, a la conversación de los grandes, a las noticias de la radio y de la televisión, estas decir que poco me decían, pero tuve mucha suerte en una cosa, yo vivía en la zona Universitaria, y los estudiantes, hablaban con libertad, si la que estaba al lado era una pequeñaja que iba con patines, entonces me enteré de la dictadura, de que la juventud quería cambiar la situación, viví revueltas, y presencié como un furgón de los grises arremetía contra los estudiantes en medio de la Diagonal, después me enteré que hubieron dos muertos, viví como los adultos del barrio abrían las puertas de las casas para dar refugio a los universitarios cuando eran perseguidos, y aprendí, aprendí mucho, me volví idealista, soñadora, defensora de la injusticia y fui contra el poder, sin saber muy bien porque, pero sabía que tenía que ir en contra de él.

Han pasado muchos años de esto que explico, muchos, y sigo aprendiendo de los universitarios, sigo aprendiendo del pueblo, sigo admirándoles, no dejan de sorprenderme.

P.D. Ya sé que ahora no es lo mismo, solo quería dejar patente que sigo aprendiendo.

Día a día, 365 días 173

¿Te quieres sentar conmigo?