Taxi segunda parte dedicada al Carde.

Bueno vayamos poniendo hilo a la aguja y sigamos como si aquí no hubiera pasado nada. Y como lo prometido es deuda y yo soy de las que cumplen
sus palabras , ahí va mi segunda aventura taxitera...no he tenido más. Tampoco es que coja muchos taxis, que conste.

Pues veréis un día que me puse de parto, a ver no estaba de parto, pero si tenia dolores de parto, pero no estaba embarazada, eso lo sabia, aun que hubo una milésima de segundo que lo dude, por que los dolores eran de parto, parto, pero me habia ya separado de mi esposo hacia 8 meses y todavia no habia catado hombre alguno, pero si dude que el Espíritu Santo igual me habia hecho una jugarreta y quería que fuera la segunda Virgen María, estaba malisima, quien a tenido un hijo ya sabe lo que es . Bueno pues mas blanca que la pared, intercambiando con verde y amarillo me fui de urgencias, como yo soy muy prudente y hay cosas que me dan mucha vergüenza me fui andando, no quería arrojar hasta la primera papilla en coche alguno, soy así, hasta malisima como estaba miraba más por los otros que por mí. Llegué como pude, arrastrándome, y no literalmente, arrastrándome con todas las de la ley, solo abrir la puerta de urgencias me acercaron una silla de ruedas, yo me tocaba el costado y como soy gordita, me imagino que pensaron que iba a dar a luz ahí mismo. Me hicieron respirar hondo, y yo decía que no, pero ellos erre que erre , que respirara hondo, y yo a obedecer, me tomaron el pulso y la presión, la temperatura y cuando fueron a ponerme el registro para saber como iba el bebe,... pude articular palabra y les dije que no estaba embarazada, que me dolían los riñones, que tenia un sudor frío y que mi estomago no paraba quieto.
Al enfermero más joven se le encendió una luz y dijo : Entonces no esta de parto , tiene un cólico nefrítico. Aleluya, yo ya pensaba que me iban a sacar una criatura de dentro la tuviera o no la tuviera.
Después de reírse un rato , que a mi poca gracia me hacía , pues seguía con mis dolores, me administraron calmantes intravenosos, que fueron mi salvación, que gustazo ..., a la media hora ya estaba todo normal. Un poco de arenilla no más,... pues la verdad para mi que tenia metido el desierto del Sahara en el riñón.
Ya más mejorada, di las gracias y me fui a buscar un taxi, era de madrugada, y me daba miedo volver sola, y pensareis , pero si no te dio miedo ir..., pues no, por que entonces no podía pensar en nada que no fuera el dolor, pero ya sedada como iba el yuyu de ir sola por la calle apareció y cogí un taxi.
Entro y doy las buenas noches y mi dirección, y como yo no me callo ni debajo del agua, le digo que me sabe mal cogerlo por un trayecto tan corto, pero que la noche no me inspira confianza. El lo comprendió y me dijo que no me preocupara , que ese era su trabajo y que lo hacia encantado, yo a mis 45 años ya no temía lo que me paso con 21 añitos, y le di de nuevo las gracias y sonreí.
Bueno, pues no se si fue mi sonrisa o el ser tan amable dándole las gracias, que el buen hombre me pregunto que hacia yo sola a esas horas, y yo más tranquila que un chinchul le dije que habia ido de urgencias, es que no se callarme. Él preguntó : Has ido sola?, y yo: claro , que ves alguien conmigo?. Supongo que le hizo mucha gracia la contestación, por que en cinco minutos que quedaban de trayecto, me explicó que él nunca dejaría a una mujer como yo ir sola al médico, que siempre me cuidaría y estaría pendiente de mí... y más cosas que dijo pero que yo ya no oía ,...por que yo alucinaba pepinillos, pero a ver... que soy normalita, y muy monjil en algunos aspectos..., se puede saber que puñetas tiene mi voz que encandila?,... por que si no, yo no entiendo nada.
Como ya no tengo 21 años , le sonreí de nuevo y le dije que a mis nueve hijos les encantaría tener un nuevo padre, pues los pobres me habian salido un poco violentos y yo creía que era por falta de mano dura, y que ellos en el fondo se lo agradecerían.
Je... , que mala soy,... se lo creyó, y él que estaba desencajado en ese momento era él, un poco más y lo tengo que llevar a urgencias cuando ya estando en el portal de casa y le habia pagado la carrera, bajaba del taxi y le digo : Si quieres quedamos mañana a las nueve. Dijo balbuceando que no podía y se piró.
Uyyyyyyyyyy que penita, parecia majete el hombre. Me quería como una reina , pero sin herederos... Y todo esto en 10 minutos, que desesperación algunos... y seguro que también hay algunas, eso no lo dudo, pero a mí , todavía no se me ha declarado una mujer...a un que en el laboratorio había una clienta un poco empalagosa,... pero eso es otra historia...

Petonets
i
sed buenos