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sábado, 8 de enero de 2011

Día a día, 365 días 41


La Catedral del Mar para Gustavo

Cuando viniste a Barcelona nos cerraron las puertas y no pudimos entrar, ¿te acuerdas?, He ido y he podido entrar y me he acordado de tu entrañable visita.

Para mí, Gus, tú tienes la fuerza, el coraje y el amor de los bastaixos.


Santa Maria del Mar


La construcción comenzó en 1329, tal como lo atestiguan las lápidas del portal de las Moreras. Un hecho destacable, que aún perdura: se acuerda que la obra había de pertenecer, exclusivamente, a los feligreses de la zona del puerto y de la Barceloneta, únicos responsables materiales del templo, ya que ellos fueron quienes la sufragaron, bien con su dinero o bien con su trabajo. Este hecho está en clara contraposición a la catedral que por aquellas mismas fechas también se estaba construyendo y que estaba asociada a la monarquía, a la nobleza y al alto clero. Parece ser que en la construcción participó activamente toda la población de la Ribera, en especial los descargadores del muelle, llamados galafates de la Ribera o bastaixos, los cuales llevaban las enormes piedras destinadas a la construcción de la iglesia desde la cantera real de Montjuïc y desde las playas, donde estaban los barcos que las habían traído a Barcelona, hasta la mismísima plaza del Borne, cargándolas en sus espaldas, una a una. La puerta principal de la iglesia homenajea a los bastaixos que ayudaron a su construcción.

6 comentarios:

Anusky66 dijo...

que bonita historia de fuerza y fe !!
tengo que ponerme al dia con alguna de tus fotos ,estoy medio desconectada estos dias
un besazo

Pepi dijo...

La foto es preciosa, espero que el día que yo vaya, no me cierren las puertas. Me encantó la historia, y desde luego Gus, se merece tu foto y mucho más, antes leí su cuento de Reyes y me llegó al alma, como llegan todas las cosas que salen de un corazón noble, y no cabe duda que él lo tiene. Me alegro de que lo conocieras, ahora falta tu mami. Besitos.

Anónimo dijo...

a veces doy palabras que luego se quedan en viento...a veces das palabras, ANITA, QUE CULPMES...yo he cumplido con la mía al ponerla en mi blog..
pero como mejor cumpliré es dándote un besazooooo ASÍIIIIIIIIII DE GRANDEEEEE..
he leido la catedral del mar...cada vez que el libro hacía referencia a ella, pues no es un libro que constantemente se refiera a ella, un pensamiento surcaba por mis adentros...ese pensamiento tenía un nombre:ANITA...
GRACIASSSS.
HA SIDO MI TERCER REGALO DE REYESSSSSS

Anónimo dijo...

He leido La Catedral del Mar, también he visitado Barcelona, aunque, como le pasó a Gustavo, no pude entrar en su interior. Es una excusa perfecta para volver a visitar una ciudad que me enamoró. Espero no tardar mucho en hacerlo.
Un abrazo.

rodolfo dijo...

toda basílica, toda catedral. iglesia , hermita o capilla es más que`piedras
Son teson, entrega y esperanza
Las piedras en todas ellas sólo son el vestido el cuerpo son las personas que componen "iglesia"
No conozco esa catedral, cuantas veces he ido a barcelona era por trabajo, alguna por turismo, y como tal he ido a visitar " la ruta turistica "
besos

Natàlia Tàrraco dijo...

IRLANDA, Gus ante el Mar, ante la catedral de aire de vértigo, límpida...bellísimo recuerdo compartido amiga y amigo. La próxima vez abriremos nosotras mismas esas puertas de la María del Mar, para Gus, de par en par.

Nos veremos pronto, quiero bajar a Barna este mes ¿quedamos?
Petonets Anna.